sábado, 2 de abril de 2016

SIGLO XXI: UN MUNDO DIGITALIZADO (PARTE II)



CAMBIOS PSICOLÓGICOS Y SOCIALES
"Si decides compartir tienes que ser consciente de qué muestras, dónde y porqué; porque pierdes el control sobre su contenido" (Jeff Jarvis)
Luis Goytisolo en el artículo Lo reciente queda antiguo considera los cambios en los hábitos cotidianos producidos por internet y las redes sociales equivalentes al paso de la Edad Media a la Edad Moderna pero en poco más de dos décadas. Considera que, "a diferencia de otros inventos la RED establece una relación íntima con el usuario", que "más estimulante que usar la RED es la posibilidad de ser él quien se vuelque en ella" y pone como ejemplo `el selfie´. La psicóloga clínica del MIT, Sherry Turkle habla de una sustitución de nuestra intimidad real por otra simulada. Considera que vivir constantemente en simbiosis con un ordenador encendido, el móvil, cambia nuestras mentes y nuestros corazones "porque nos ofrece tres fantasías muy gratificantes: podemos tener atención constante, siempre va a haber un foro en el que ser escuchado y nunca tendremos que estar solos. Las dos primeras necesidades se satisfacen a través de las redes sociales, pero la tercera es la que nos está llevando a situaciones emocionales de graves consecuencias". Reivindica el valor del aburrimiento, la paciencia, la imaginación y la soledad tan importante y necesaria "para reflexionar, para concentrarse, para tener conocimientos, para conocernos".
César Rendueles en Sociofobia hace una crítica a esta sociabilidad fácil y cómoda (me conecto y me desconecto cuando me apetece) y a lo que denomina ciberfetichismo, esa ideología que nos propone una solución a los problemas de convivencia y de la acción por medio de lo cibernético, lo que denomina "espejismos digitales".
Nicholas Carr alerta en Atrapados: cómo los máquinas se apoderan de nuestra mente de que la externalización de capacidades hace que perdamos habilidades y denuncia que "buscadores, redes sociales y empresas de software captan nuestra atención y dirigen nuestro pensamiento". Como dice Eugene Morozov:"Las empresas de tecnología son como las cadenas de comida rápida, las casas de apuestas o los casinos: crean una adicción que luego tiene unas consecuencias: en el caso de las tecnológicas, la distracción". Servicios como facebook generan una ansiedad sobre nosotros, nuestros amigos o nuestro lugar en la sociedad.
Para Byung-Chul-Han las fuerzas del mercado neoliberal han creado como norma cultural 'la transparencia' cuyos dictados imponen un sistema totalitario a expensas de otros valores sociales como la vergüenza, el secreto y la confidencialidad. Describe una sociedad dominada por el narcisismo y la autoreferencia donde la represión ha sido interiorizada con la violencia funcionando dentro de cada individualidad libre.




EL NUEVO PANÓPTICO
"La sociedad de la transparencia lleva a una sociedad sincronizada y a la conformidad"(Byung-Chul-Han).
Vemos desarrollarse la pesadilla orwelliana ante nuestros ojos. El control de los datos personales y la monitorización permanente de cada usuario por empresas y organismos sin nuestro consentimiento, así como el aspecto en el que hace hincapié Jorge lozano en El discurso Histórico de que "nos vigilan pero también vigilamos" , porque somos víctimas y verdugos a la vez, nos priva de lo que el filósofo Georg Simmel considera la mayor conquista de la humanidad: el secreto. Jorge Lozano anticipa un mundo en el que "la privacidad se convertirá en un artículo de lujo con una privacidad para ricos y otra para pobres"
El grupo Tiqqun en el relato La Hipótesis Cibernética nos muestra la pesadilla de vivir en una sociedad-red de nodos transparentes interconectados cuya información es gestionada automáticamente dentro de un entorno de Capitalismo cibernético. Cada gesto o movimiento es monitorizado en un gran panóptico global. En el orden cibernético la relación se reduce a interacción, la vida se pone entre paréntesis y nos deja reducidos a ´perfiles´ convirtiendo la experiencia en estadística. Pero no somos nodos transparentes, ni nuestras vidas son información, ni nuestras relaciones con los demás son enlaces. La Hipótesis Cibernética no es un poder horizontal, aunque se presente como tal sino que sigue siendo una forma de poder normativa, coactiva y exterior. Como antídoto contra la tiranía de la transparencia proponen formas de escribir que dejen espacio y libertad al lector: el lenguaje poético. Establecen tres estrategias de resistencia :Lentitud (aprender a desconectar y desconectarnos del capitalismo cibernético), ritmo (plural, abierto a la improvisación, no al ritmo de la máquina) y niebla (recuperar la "autogestión del sentido").
El poder está en quien controle los flujos de información almacenados en servidores como Google capaz de almacenar el 20% de la información en todo el mundo. Las grandes compañías que poseen estos servidores contienen información para hacer un perfil de cualquier persona gracias a que les damos el control de nuestros datos. Crear una alternativa a facebook con dinero y control público, como propone Morozov, con un control ciudadano al uso de datos para evitar que las nuevas formas de negocio sean causa de explotación es una propuesta que debe estar en la agenda de todos los partidos políticos que luchen por la libertad.
Sabemos que los nuevos smart tv o las consolas registran nuestras conversaciones y que es posible rastrear móviles aunque estén apagados. En el nuevo panóptico la posibilidad de ser destruido por un dron dirigido por alguien a miles de kilómetros de distancia que puede controlarte las 24 horas del día no es ciencia ficción porque, como dice Julian Assange, si pueden espiar al Secretario General de las Naciones Unidas también pueden espiar a cualquiera. Debemos luchar por nuestra privacidad no porque tengamos algo que esconder, sino porque tenemos algo que proteger, nos dice Edward Snowden.


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